Paso a paso, buscando nuestro lugar en el mundo y siguiendo nuestro camino de corazón, vamos dejando aquí documentados los misterios que nos inspiran en esta travesía.
Últimamente he observado que llegan más colibríes al jardín. Las flores que he visto que les gustan son unas salvias silvestres de flores rojas que trajimos una vez de un paseo que dimos por el campo. También les gusta el mirto de flores rosas, es por eso que a los colibríes también les dicen Chupamirto. El toronjil rosado y la planta de flores rosas que es propia de Tepoztlán pero que no sé como se llama (investigar nombre) también les gustan mucho.